Desde tiempos inmemorables, diferentes culturas han dado a la práctica de la orgía un estatus de elevación espiritual. De hecho, en algunas de ellas su ejercicio estaba relacionado con abrir las puertas espirituales de comunicación con las divinidades. Tanto es así que la palabra orgía deriva de un término griego usado para denotar un rito, misterio o fiesta de carácter religioso.
Por ejemplo, durante el apogeo de las culturas clásicas griegas y romanas, se celebraban orgias llamadasbacanales, dedicadas a dios griego y romano Baco o Dionisio. Estas se caracterizaban por buscar el placer y la diversión mediante la bebida, la comida y el sexo, practicado este último en algunas ocasiones de forma grupal. De hecho, en la actualidad usamos el término bacanal como sinónimo de orgía, y en general de cualquier actividad que busque la satisfacción viciosa y desenfrenada de la pasión sexual.
La expansión del cristianismo significó no solo el fin de la orgía como actividad religiosa, sino que la misma fuese declarada aberrante y espiritualmente inaceptable. De hecho, en su afán por abolir esta práctica, la iglesia la asoció a cultos religiosos impropios, tales como el satanismo y la brujería. Justo por ello aún asociamos los aquelarres de las brujas de la época medieval con orgías de carácter lésbico, algo que resulta históricamente incorrecto.
Fue durante la liberación sexual de la década de los 60 del pasado siglo, en plena revolución sexual, cuando la práctica de las orgías volvió a tomar auge. En dicha oportunidad, ya no como experiencia religiosa, sino como una actividad de liberación del cuerpo y el alma. Así, muchos movimientos de la época que adoptaron el lema de hacer el amor en lugar de la guerra, practicaron en alguna medida el sexo grupal.
En la actualidad en la sociedad occidental la orgía ha perdido el toque místico que históricamente le caracterizó, para transformarse en una práctica sexual más. De hecho, técnicamente es una orgía cualquier actividad sexual en la cual intervienen cuatro o más personas, indistintamente de la conformación de sus sexos. Un tipo particular de orgía es la que ocurre cuando dos parejas heterosexuales practicantes del swinging se juntan para interactuar entre sí, quedando así una conformación de dos hombres y dos mujeres. También los practicantes del BDSM generalmente se aventuran a tener encuentros sexuales grupales, de cuatro o más participantes.
Algunas acompañantes de lujo Barcelona ofrecen entre sus servicios participar en orgías, siempre que se respeten ciertas directrices. Las conformaciones en que asienten participar generalmente es alguna de las siguientes:
- Tres damas escorts y un caballero, con frecuencia.
- Dos chicas escorts y una pareja heterosexual, eventualmente.
- Dos acompañantes escorts y dos caballeros heterosexuales, solo en pocas ocasiones.
La presencia de dos o más acompañantes de lujo Barcelona en tu propia orgía, te garantiza que la misma será una experiencia sexual inolvidable. Con su sapiencia ellas transforman dicho momento en una práctica enriquecedora y excitante, que queda grabada con el fuego de la pasión en tu piel. Solo imaginar sus bellos y atractivos cuerpos al desnudo interactuando con el tuyo, produce una excitación desbordante. Y lo mejor es que estas damas no poseen tabúes, y están dispuestas a experimentar lo que tu les propongas en materia sexual.
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